He visto Ágora… y me ha gustado. Ambientación, ritmo narrativo, fotografía, música… todo muy cuidado en aras de una inmersión en la historia que, como aficionado al cine, me ha dejado un buen sabor de boca. Lo único que eché en falta en una producción española fue algún actor español.
Es verdad que es una película y que Amenábar se ha permitido pequeñas licencias históricas como la edad de Hipatia cuando murió o su precoz visión de la teoría heliocéntrica, pero por mi parte se las admito.
La película nos traslada a la Alejandría durante la decadencia del imperio romano y, a mi humilde entender, se sirve de Hipatia para trasmitirnos su verdadero mensaje: la sinrazón de los fanatismos religiosos, vengan de donde vengan.
Hipatia no cree en dioses. Ni en cristianos, ni en judíos ni en paganos. Para ella, su única religión es el saber.
A mí siempre me ha parecido que para ser feliz es preferible ser ignorante. En el libro del Eclesiastés de la Biblia (pedazo de best seller) se puede leer: Quien añade sabiduría, añade dolor. Totalmente de acuerdo. El saber no ocupa lugar, pero tiene un precio…. Y si no, que se lo pregunten a Hipatia.
Es verdad que es una película y que Amenábar se ha permitido pequeñas licencias históricas como la edad de Hipatia cuando murió o su precoz visión de la teoría heliocéntrica, pero por mi parte se las admito.
La película nos traslada a la Alejandría durante la decadencia del imperio romano y, a mi humilde entender, se sirve de Hipatia para trasmitirnos su verdadero mensaje: la sinrazón de los fanatismos religiosos, vengan de donde vengan.
Hipatia no cree en dioses. Ni en cristianos, ni en judíos ni en paganos. Para ella, su única religión es el saber.
A mí siempre me ha parecido que para ser feliz es preferible ser ignorante. En el libro del Eclesiastés de la Biblia (pedazo de best seller) se puede leer: Quien añade sabiduría, añade dolor. Totalmente de acuerdo. El saber no ocupa lugar, pero tiene un precio…. Y si no, que se lo pregunten a Hipatia.
5 comentarios:
A mí me gustó mucho también. He leído bastantes comentarios de personas criticando la película, y a mí me encantó, la verdad.
Abrazos,
Por diversas circunstancias aún no he tenido ocasión de ver Ágora,por ello no puedo dar mi opinión personal, pero tu articulo en este blog me parece que no solo anima a verla ,sino que lo argumentas muy acertadamente.
Te daré mi opinión personal cuando la vea.
Sabes algo de Varo? Su blog esta parado y me extraña que no escriba nada.
Un saludo muy,muy cordial.
Andrés, por suerte el público está respondiendo. Me encanta que la gente vaya al cine y más si es español. Quién sabe si algún día veamos alguna de nuestra novelas en la pantalla.
Te gustará la película, Madolok. En cuanto a Varo sé que está bastante liado con sus trabajos. Estoy seguro de que ahora que viene el frío, tendrá más tiempo para sus escritos.
Un abrazo para los dos
Todavía no fui a verla y ya en Internet se rasgan las vestiduras (campaña orquestada desde el PSOE contra los cristianos...de la que siempre es pistoletazo Abenamar, véase la campaña a favor de la eutanasia). Me recuerda al contubernio judeo-masónico de Franco. Paranoia pura. Y sí, licencias poéticas aparte, creo que la ignorancia nos defiende de cometer muchas injusticias (por pura presunción). De hecho -aunque se haya olvidado- el Dios de los cristianos buscó siempre a los sencillos (por no decir ignorantes). La veré si puedo, para poder opinar. Un abrazo.
Efectivamente, Francisco. Lo importante para arengar las masas es que estas no piensen demasiado en lo que hacen. Unos no piensan porque no quieren y otros porque no saben.
Un abrazo.
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