jueves, 26 de julio de 2012

Las novelas más vendidas

Elkar es una cadena con 18 librerías repartidas por Euskadi, Baiona y Navarra que suele publicar semanalmente la lista de las novelas que más vende. Aquí les dejo la lista de ficción de la semana del 17 de julio. Sé que muchos libreros de Elkar están recomendando mi novela. Así que solo puedo decirles una cosa: eskerrik asko, bihotz bihotzez.
LOS MÁS VENDIDOS EN CASTELLANO – FICCIÓN
  1. CINCUENTA SOMBRAS DE GREY  – E.L. James – Grijalbo
  2. EL ABUELO QUE SALTO POR LA VENTANA Y SE LARGO – Jonas Jonasson – Salamandra
  3. CINCUENTA SOMBRAS MÁS OSCURAS – E.L.James - Grijalbo
  4. LA COLECCIONISTA DE SENSACIONES – Blanca Holanda – Bohodon Ediciones
  5. CINCUENTA SOMBRAS LIBERADAS – LIBERADAS - E.L. James – Grijalbo
  6. LA CONJURA DE CORTES – Matilde Asensi – Planeta
  7. LA CIUDAD DE LOS OJOS GRISES – Felix G. Modroño – Algaida
  8. LA SOMBRA DE LA SIRENA – Camilla Lackberg – Maeva
  9. ENREDO DE LA BOLSA Y LA VIDA – Eduardo Mendoza – Seix Barral
  10. EN EL PAIS DE LA NUBE BLANCA – Sarah Lark – Ediciones B

domingo, 22 de julio de 2012

¿Se publica demasiado?

Un interesante artículo firmado por Toni Iturbe en Qué Leer este mes me ha incitado a escribir esta entrada. Es posible que haya quien piense –yo mismo- que no me hace falta meterme en harina, pero uno es cómo es, y si mis reflexiones pueden servirle a alguien, las doy por bien contadas.
Se publican demasiadas novelas.
Si el dato es correcto, durante el primer semestre del año salieron al mercado español 7.644 títulos, incluido La ciudad de los ojos grises (la ficción para adultos representa aproximadamente el 17% del total de libros publicados en este período; nada menos que 46.640). Dicho de otro modo: cada día laborable se han publicado una media de 63 novelas.
Sí, ya sé que hay quien dice que no sobran libros, sino que faltan lectores. Pero ¿qué quieran que les diga? Mientras llegan estos lectores y se incorporen a la lectura todos y cada uno de los 450 millones de los hispanohablantes repartidos por el mundo, mi opinión es que se publica en exceso. Si no, que se lo pregunten a los libreros, a los que se les ofrecen 1.405 novedades semanales (sin contar digitales). Los pobres, en algunas ocasiones, no pueden ni abrir las cajas con los nuevos libros porque no tienen dónde colocarlos (esto lo explica muy bien una entrada del blog de Librería Cámara). O a los comerciales de las distribuidoras, que tienen que vender todos sus productos por igual. O a los periodistas culturales, bombardeados a diario por los responsables de comunicación de las editoriales que luchan por conseguir un hueco en algún periódico o en algún programa de radio para cualquiera de sus autores.
En esta jungla, prevalece la ley del más fuerte. Los grandes sellos tienen más sitio en las mesas de novedades de las librerías, emplean más dinero en promoción y pueden elegir a qué autores publicar. Y por supuesto que cuenta la calidad de la novela pero, en muchos casos, no más que la capacidad comercial que posea el autor para dar a conocer su propia obra. Ante escritos similares, el editor –a tenor de su criterio de ventas- optará por publicar la novela de un personaje mediático antes que la de un desconocido.
Por todo lo que hemos explicado, la venta inicial es fundamental para que la novela vaya aguantando en las librerías. Y, al menos en el arranque, vende más el libro de un concursante de Gran Hermano o el de un showman televisivo que la novela de Pepe Pérez, por muy buena que esta sea.
Obvia y lícitamente, las editoriales se valen de sus propios autores de éxito para promocionar las obras de las escasas apuestas que hacen de autores noveles. ¿Es solo una casualidad que las dos novelas de autoras españolas que aparecen entre las diez más vendidas en Nielsen tengan un fajín con una frase de recomendación de las dos escritoras más vendidas de este país? Por cierto, Nielsen es la única lista de ventas fiable a nivel nacional en lo que se refiere a ranking. Por eso, no estaría mal que los periódicos dejaran de publicar cada uno la suya o, al menos, se guiaran por criterios objetivos.
En este maremagno, ¿cómo dar con la novela que nos apetecería leer? Podríamos decir que siempre nos queda la crítica literaria. Craso error. La crítica, como tal, ha desaparecido. En cierto modo, es lógico. Porque los medios culturales se encuentran en la UVI, mantenidos principalmente por la escasa publicidad que pagan las editoriales, las cuales no van a permitir que se hable mal de ninguna de sus novelas.
Resulta curioso comprobar que la mayoría de las reseñas en medios y en blogs son muy benévolas. Tampoco lo censuro. Quien más, quien menos, sabe el enorme esfuerzo que supone para cualquier autor escribir una novela y luego, encima, publicarla. Además, en muchos casos, son las editoriales –cuando no los propios autores, los que hacemos llegar los libros a periódicos y blogs literarios.
A mi juicio, este es el panorama actual. Y estas son las reglas del juego. Parece que no sean del todo justas, pero son las que hay mientras no cambien. Quizás no está mal que las conozcan los escritores que aspiran a su primera publicación. La inmensa mayoría de los novelistas que consiguen publicar no ven un céntimo de sus ventas. Para un editor normal, vender 2.000 ejemplares de una novela es todo un éxito (aunque parezca mentira, esta cifra está al alcance de muy pocos escritores). Si el autor percibe entre el 8 y el 10% de las ventas, menos impuestos, hagan cuentas. Con suerte: tres o cuatro mil euros por un año o más de trabajo.
Pero, insisto: son las reglas del juego que hay que conocer antes de jugar para no llevarse a engaño. Una vez que se sabe a lo que estamos jugando, invito a todos aquellos autores noveles que lo hagan. Hay veces que también se gana… como en la lotería.

viernes, 13 de julio de 2012

Sospechoso habitual

Este miércoles se ha presentado en la Semana Negra de Gijón una antología de relatos bautizada como Sospechosos habituales: tras la pista de la nueva novela negra española, en la que he tenido el placer de participar.
Lo cierto es que me siento muy orgulloso de que mi nombre se encuentre junto a los de José L. Caballero, Reyes Calderón, Pepe Colubí, Leo Coyote, Francisco José Jurado, Antonio Marcos, Paco Piquer Vento, Carlos Salem, Marta Sanz, Willy Uribe y a los de mis amigos Gregorio León, David Torres, Javier Márquez Sánchez y Cristina Fallarás, reciente -y brillante- ganadora del Premio Hammett de novela.
Aún no tengo el libro en mis manos, por lo que no he podido leer los relatos, pero estoy seguro de que serán del gusto de los lectores del género. Espero que el nuevo caso del doctor Zúñiga, esta vez sin salir de Salamanca, esté a la altura de los de mis compañeros de aventura literaria.

miércoles, 11 de julio de 2012

Rostros del tren negro 2012

Era mi primera visita a la Semana Negra de Gijón y la experiencia no pudo ser mejor. Desde el viaje en el tren negro hasta la organización del evento, sin olvidar el reencuentro con viejos amigos y el conocimiento de otros nuevos.  
Aquí les dejo los rostros de unos cuantos participantes en la Semana Negra, desde el jefe Paco Ignacio Taibo II exhalando el humo de su sempiterno cigarro, hasta el reflejo sereno en el cristal de la hija de Elia Barceló, pasando por la elegancia de Lisa, la bonhomía de Martin, la candidez de María, la concentración de Jesús, la honestidad de Jon, la sonrisa de Elena, la vida interior de Fernando, la polivalencia de Javier, los ojos escrutadores de José Manuel, la apacibilidad de Juan o la musicalidad de Carmen.
 Lisa Diez Gracia

 Martin Roberts

 María Zaragoza

 Jesús Lens

 Jon Arretxe

 Elena Martínez

 Fernando Marías

 Javier Márquez

 José Manuel Ribeiro

 Juan Guinot

 Carmen Redon

Nina Barceló

martes, 3 de julio de 2012

Gijón tiene nombre de café

Sí, ya sé que es al revés. Que fue un asturiano el que fundó el Gran Café Gijón allá por finales del siglo XIX, pero no me digan que el título de esta entrada resulta así más... literario. Y eso sin entrar en consideraciones sobre lo que representa para mí este emblemático establecimiento del paseo Recoletos, como algunos de ustedes ya conocen.
El hecho es que no menos literario que el café madrileño es el municipio asturiano. Y es que este año se celebra la XXV Semana Negra, toda un clásico. 
Lo cierto es que ya tenía ganas de pasarme por Gijón en julio. Nunca fui en estas fechas (dicho esto con acento asturiano, que conste). Por eso, me hace especial ilusión ir por primera vez, y además participando activamente. 
De todos son conocidos los problemas que ha tenido la Semana Negra, que casi han provocado su suspensión. También hubiera sido mala suerte, tanto a nivel general como particular, siendo mi primera visita.
Pero el tesón y las ganas de sus organizadores han tenido su premio y, un año más, Semana Negra estará en Gijón. Esta vez, en los terrenos de Naval, del 6 al 15 de julio.
Aquí les dejo el plano
y el programa provisional
Si todo va bien, viajaré en el Tren Negro el día 6 y al día siguiente, festividad de San Fermín, tendré un encierro a las 20:30 horas en el Espacio A quemarropa para charlar de La ciudad de los ojos grises.
El miércoles 11 de julio, aunque yo ya no estaré, se presentará en la Carpa del Encuentro la antología de relatos Sospechosos Habituales: tras la pista de la nueva novela policíaca española en la que he participado, pero de la que prefiero no hablar hasta su puesta de largo oficial.
Así que no está mal para ser mi primera visita a Semana Negra. Y eso sin contar con las sidras que tomaremos con colegas, periodistas y lectores. Hasta pronto, Gijón.